EL ORIGEN DE LA DANZA

Andrea Caceres

La danza es un arte en el que se comunican ideas y sentimientos mediante movimientos del cuerpo. Se trata de una forma de expresión que ha acompañado al hombre en su proceso evolutivo, pues los primeros habitantes, a través de la danza, le daban una explicación a lo que ocurría en la naturaleza.

Según Vilar, el origen de la danza nos remonta al Paleolítico y al Neolítico, época en la que el hombre va da un gran un paso en su proceso de evolución. Si antes estaba desprovisto de los peligros de la naturaleza por su bajo nivel de preparación, es con el descubrimiento del fuego y la elaboración de herramientas, que el hombre llega a desarrollarse y vincularse más con su entorno.  (2010, p. 21-22)

Las primeras manifestaciones de la danza podemos encontrarlas en las pinturas rupestres que datan de una antigüedad de más de 10 mil años. En ellas se muestran a personajes alrededor de un fuego y de manera colectiva. Aunque sabemos que no existe mucha información sobre estos bailes debida a la poca documentación, esto nos revela cuán importante era la danza para dicha sociedad.

Vilar menciona que antes que la palabra estuvo la danza, ya que, en su necesidad de comunicarse, el hombre, mediante el gesto, expresaba sus experiencias y pensamientos concretos. Dicha comunicación era gestualmente con todo el cuerpo.  (2010, p. 23)

Sin embargo, la danza nace no solo para satisfacer la necesidad de comunicación del hombre, por ejemplo, el hombre no sabía cómo surgían las lluvias y danzaban para expresar su miedo o alegría. Sin embargo, existen tres razones más por las que se originaron las danzas de esta etapa:

1.     Necesidad de satisfacer el hambre.

2.     Necesidad de entender la naturaleza

3.     Necesidad de entender su propia naturaleza

El hombre primitivo expresaba sus emociones, deseos o necesidades mediante movimientos y sonidos como una forma de representar su cotidianidad y sus creencias religiosas. Es así que la da danza surge para expresar todas las necesidades vitales del ser humano: “necesidad de alimento, (caza, recolección...), de tipo social (matrimonio, guerra...), religioso (ritos fúnebres, lluvia, trueno...)” (Urtiaga de Vivar, 2017, p. 5).

Con respecto al carácter religioso, el hombre deseaba comunicarse no solo con sus semejantes sino también con lo sobrenatural, por ello, recurre a su propio cuerpo para hacer contacto con las divinidades, “era su modo de rendir culto a la naturaleza y demostrar instintivamente sus sentimientos, temores o necesidades” (Urtiaga de Vivar, 2017, p. 7).

 

REFERENCIAS

Vilar, J. (2010). Breve historia de la danza. Horizonte.

Urtiaga de Vivar, J. (2017).  Evolución de la danza y su lugar de representación a lo largo de la historia. Desde la prehistoria hasta las vanguardias de la modernidad. Axa, una revista de Arte y Arquitectura, 9, (1-21). https://revistas.uax.es/index.php/axa/article/view/1205